7 de setiembre, 2020.- En un final dramático del clasificatorio Olímpico, en la noche del 3 de noviembre de 2019 en Dublín, el partido entre la República de Irlanda y Canadá acabó con un empate en el segundo partido de una eliminatoria a dos mangas. Los lanzamientos de penalti iban a decidir quién iría a Tokio 2020.
"También fue un momento importante para ellas, porque sin todo el trabajo de base que pusieron hace 20 o 30 años, nosotras nunca habríamos tenido la oportunidad de conseguirlo", declaró Katie Mullan, donde dicha victoria fue la culminación de todo el trabajo duro realizado por las jugadoras del combinado, tanto en el pasado como en el presente.
Con más fondos disponibles en el período previo a la Copa del Mundo y al clasificatorio Olímpico, el equipo pudo aumentar su entrenamiento de una a tres veces por semana, lo que tuvo un impacto en sus actuaciones a nivel internacional. "Obviamente, estamos en una posición mucho mejor. Tenemos más fondos. Entrenamos juntas al menos tres días a la semana. Se ha transformado por completo el deporte en Irlanda para nosotras, lo cual ha sido increíble", agregó Mullan.